Nada determina la cantidad de puertas de la habitacion. Ni el amoblado, ni la cantidad de cadenas ni armas ni dolor. Su poder se medira en el verosimil del espacio. El espacio que puede reflejar como un espejo cada una de las formas sociales, asi como simplemente puede buscar confundir al usuario. El usuario busca trabajosamente un sentido, si la produccion de sentido es necesaria, la habitacion se volvera ininterpretable.

Una puerta da a Roma y la otra a un subespacio hecho de luces y tuercas.
Una herida puede durar años abierta y nadie morirá, hasta que las muertes se agreguen a la verdad que persigue el juego, el cual llegará a cierta tendencia y se quebrará. Ese es el ideal, quebrar cada vez más la idealizacion del usuario respecto a lo que esta interpretando.

¿Se puede?